Toda empresa, encuentra difícil la continuidad a largo plazo. Las empresas enfrentan retos referentes a los mercados, las tecnologías, competidores, entre otros, que afectan su desempeño sin tener en cuenta el aspecto familiar.

Las empresas familiares además de los temas propios del negocio, están afectadas por las emociones y necesidades latentes en toda familia.

Trabajar juntos intensifica las relaciones familiares y puede exacerbar rivalidades y celos. Esta posibilidad de fricción entre los seres queridos y los intereses de la empresa es lo que hace la empresa familiar algo único.

La Empresa Familiar debe balancear las exigencias de la familia con los intereses de la empresa. Cuando la mayor importancia es dada a las exigencias de la empresa, aumentan las posibilidades de un descuido de la comunicación familiar. Si falta comunicación familiar, se potencian las probabilidades de lesiones emocionales. Por el contrario, si la mayor importancia es dada a los intereses de la familia, se abre la oportunidad de poner en peligro el liderazgo eficaz de la empresa. En este caso, la empresa corre el riesgo de no evaluar adecuadamente el desempeño de los familiares activos en el negocio y podría dar lugar a una mala gestión empresarial.

El equilibrio de familia y empresa, se logra abordando temas importantes como lo son el control, las carreras, el capital, los conflictos y la cultura.

En cuanto al control, la familia que dispone la forma de la toma de decisiones, referente a la gestión y la propiedad de la empresa, afianza la confianza mutua entre sus miembros. Iniciar los planes de sucesión de la propiedad, del liderazgo familiar y del liderazgo en la empresa facilita la transmisión exitosa del patrimonio.

Respecto de las carreras profesionales de los familiares en la empresa, la definición de las reglas bajo las cuales los miembros de la familia acceden a empleos, con ascensos y recompensas basados en su actuación, puede servir de estimulación a la proxima generación para prepararse adecuadamente.

El tema del capital recomendamos abordarlo en un acuerdo entre accionistas. La utilización de este acuerdo es útil para definir la formula de valoración de acciones y viabilizar la compraventa entre socios. Adicionalmente, se pueden acordar políticas para las distribuciones de dividendos, las capitalizaciones, los endeudamientos, entre otros. Políticas claras y equitativas entre socios, tienden a disminuir los conflictos entre ellos y respecto de sus herederos.

En relación a los conflictos familiares, somos todos testigos de que entre familiares que trabajan juntos hay abundantes oportunidades de diferencias. Sugerimos a toda familia definir un foro dentro del cual los conflictos familiares puedan ventilarse. Algunas familias han encontrado útil la creación de un Consejo de Familia; mientras que otras, la designación de intermediarios para la resolución de conflictos. Tratamos con el establecimiento de este foro, evitar que los conflictos familiares sean ventilados en la gerencia de la empresa.
Por último destacamos la importancia de la cultura. El proceso de equilibrio requiere que la familia destine tiempo y espacio para la promoción de sus valores a través de la cultura. Identificarse como familia con el deporte, las artes, la música o alguna causa social, entre otras posibilidades, puede ser altamente gratificante para sus miembros. Son un vehículo de unión, de identificación como grupo y de disfrute.

El objeto de equilibrar adecuadamente empresa y familia es ayudar a las familias ser propietarios de empresas dinámicas y duraderas, dentro de relaciones armoniosas.

Por: Ana Judith Alma