“El aprecio es el mejor motivador” es la filosofía de Larry Page, el director general de Google. Las investigaciones indican que nos esforzamos más si nuestro trabajo nos parece interesante, si pensamos que contribuimos a algo significativo y si sentimos que los demás aprecian lo que hacemos.
El aprecio tiene mucho que ver con el agradecimiento de los miembros de todo el equipo y eso ayuda a crear un ambiente laboral donde no solo nosotros nos sentimos bien, sino que ese sentimiento se expande al resto del equipo produciendo un lugar productivo y alegre.
Ser agradecidos en el lugar de trabajo nos deja los siguientes beneficios:
1. Trabajas más feliz. Eso implica que estás dispuesto a estar atento a los detalles, donde está todo el profesionalismo. Ya no es una tarea que hay que hacer sino es una tarea que quieres hacer. Gran diferencia.
2. Fortalece el equipo de trabajo. Ser agradecido hace que tu trabajo sea valorado y por ende tu tambien. El hecho de que estés agradecido de tus compañeros de trabajo y el trabajo que ellos hacen esparce una bendición contagiosa que hace que el agradecimiento se vuelva una costumbre dentro del equipo.
3. Actitud positiva a la resolución de problemas. Al ser agradecidos tendemos a desarrollar una actitud positiva que ayuda a concentrarnos no tanto en el problema, sino en las posibles soluciones que podemos idear en equipo. Se tiende a ver el vaso medio lleno en vez de ver el mar de problemas que podríamos tener.
